martes, 27 de mayo de 2008

¿Cómo enseñar para que la diversidad de estudiantes presentes en una sala de clases aprenda?


En la realidad de los colegios actualmente, donde en algunos establecimientos educacionales la matricula de los alumnos bordea los 45 estudiantes por curso, se torna muy complejo el tema de la enseñanza y del aprendizaje, donde por lo general, son muy pocos los alumnos que logran un aprendizaje significativo. Esto puede ser por diversos motivos, y es acá donde el profesor debe centrarse para lograr el objetivo planteado, que es el de educar.

Para obtener los resultados esperados, debemos realizar un análisis completo de todo lo que puede influir en este complejo proceso. En primera instancia, considero que para lograr un aprendizaje como tal es indispensable conocer la realidad del colegio en el cual estamos, puesto que no será lo mismo enseñar en un colegio “ABC1” que en uno municipal y en base a esto, también observar el contexto espacial en el cual se desenvuelve, puesto que así veremos las influencias a las cuales está sometido y el tipo de jóvenes con los cuales trabajaremos. Una vez revisado el espacio geográfico, yo me centraría en la realidad de cada curso, porque, querámoslo o no, siempre existe cierta jerarquización en el nivel educacional de cada grupo, independiente del nivel del cual hablemos, por lo general hay ciertos cursos “A” o “B” que presentan características particulares.

Cuando hayamos visto todo el contexto general, es ahora donde nuestra mirada se enfoca en los estudiantes en particular, difícil tema ¿no? Puesto que en algunas ocasiones podemos llegar a tener un número desorbitante de alumnos y resulta complicado conocerlos a todos, pero, considero que, como he planteado en ocasiones anteriores, con planificación si puede ser posible. Además que, podemos utilizar ciertas técnicas para saber cuáles son los intereses de los jóvenes, también sus necesidades de aprendizaje (como por ejemplo, preparación de PSU), vale decir, con simples cuestionarios o encuestas masivas tendremos un primer acercamiento con sus características personales y así, a pesar que el tiempo será reducido, debemos optimizarlo, y en base a esto trabajar el tema educacional.


Creo que la didáctica acá tiene un rol fundamental, porque si los contenidos que enseñemos resultan agradables e interesantes a los jóvenes, si sienten que les puede ser útil en su vida, será más fácil todo el proceso, es importante que los contenidos tratemos de acercarlos a su realidad, que no sientan que son ajenos, y logren entender la implicancia que pueden tener en el día a día. Es por esto que el docente debe manejar y conocer los distintos métodos para saber adecuarlos a su situación en la sala de clases, puesto que como es sabido no todos aprendemos de la misma manera.

En relación a esto último, destaco la importancia de conocer la realidad intelectual y emocional de los jóvenes, y de las distintas capacidades y habilidades que éstos presentan, con esto podremos saber, de manera general, como ellos aprenden. Por ejemplo, hay jóvenes que captan mayoritariamente de manera visual, otro simplemente escuchando una clase expositiva, otros haciendo esquemas, otros leyendo, etc., pueden ser muchos y variados los procedimientos de aprendizaje, por eso, yo optaría por realizar una mezcla de sistemas de enseñanza, donde varíen las clases, no cayendo en la monotonía ni en un sistema clásico. Y en un tema muy personal, pondría énfasis en el estudio grupal, creo que funciona efectivamente.

Un tema importante, y que no puedo dejar de mencionar son los citados casos de los niños con hiperactividad o déficit atencional… conocidos como los “niños problema”, cuan complicado es trabajar con ellos, pero, según lo aprendido en mi paso por materias educacionales, lo que nunca se debe hacer con ellos es aislarlos, porque si lo hacemos ellos sienten que están captando más la atención y eso es precisamente lo que debemos evitar. Para estos casos especiales existen profesionales que nos pueden guiar, tanto a nosotros como a ellos, pero nosotros, debemos pensar en la integración… la exclusión realmente, conduce a nada productivo, menos si hablamos de niños con severas carencias en todo ámbito. Además, cabe resaltar que los niños con problemas de aprendizaje suelen tener un nivel normal de inteligencia, (para más información ver el link: http://www.aacap.org/cs/root/facts_for_families/informacion_para_la_familia/los_ninos_con_problemas_del_aprendizaje_no_16), por lo que se deben tratar como personas normales, haciendo que trabajen en grupo y que sean respetados, además de darles instrucciones claras y precisas, entendibles con facilidad.

Para finalizar, creo que todo este proceso de aprendizaje debe ser en conjunto entre profesores y alumnos, tal como lo plantea el principal referente del paradigma sociocrítico: PAULO FREIRE, el cual en su escrito “pedagogía del oprimido” plantea que "...los hombres se educan en comunión, medializados por el mundo." (Freire, 2007), y que ahora los alumnos no sean vistos como simples receptores de contenido (en palabras de Freire la denominada "educación bancaria"), sino que sean factores y constructores de su propio conocimiento ("educación problematizadora"), claramente coincido con esta visión más actual de la educación donde el docente también puede aprender, pero centrándose en el objetivo primordial, el cual es que lograr la enseñanza y la racionalización de los contenidos.

Por último, destacar que el día a día nos dirá muchas cosas… la práctica es fundamental para el aprendizaje, sólo que debemos estar muy bien preparados en el aspecto pedagógico para poder lidiar con todas estas complejidades, pero destacar que es parte de la vida de un docente disfrutar de los dulce y agraz que resulta el área educativa, sin embargo debemos pensar que todas estas situaciones nos enriquecerán y nuestros alumnos aprenderán de nosotros, tanto como nosotros de ellos.



viernes, 16 de mayo de 2008

¿Cuál es según tú opinión la forma más justa de evaluar el desempeño del estuadiante?




Ante la pregunta, trato de situarme en dos posiciones, en la del alumno y en la del profesor.

Pienso que para los alumnos, es mucho más importante la evaluación de proceso. Como estudiante, creo que con dicha manera se considera la integridad de toda labor ejercida durante un período de tiempo que no puede ser obviado. Además que la evaluación clase a clase implica mayor creatividad y dinamismo, donde todo lo que se haga debe ser evaluado, sin caer en la monotonía.

Por otra parte, está la comodidad del profesor, donde la evaluación por proceso implica un desgaste para el docente pues debe haber una planificación constante, además de la ya establecida. Es por ello que, generalmente, se opta por la evaluación con tiempo prolongado.

Es complejo definir la forma más justa, pues cada alumno tiene distintas capacidades, todos son diferentes, por lo que optar por una sola medida ya es injusto. Es por ello que yo conjugaría diversos tipos de evaluación, como pruebas escritas, orales, disertaciones, trabajos, etc., pero siempre centrándome en el proceso, aunque ello reitero, implique desgaste. Bueno, es lo que considero ahora, desde fuera, quizás la practica me desvié de mi propósito, pero ¿Por qué ser tan poco optimista y pensar que no se puede realizar?, creo que con una correcta planificación el tiempo puede perfectamente alcanzar para todo.

Otro punto donde quisiera enfatizar es en el trabajo grupal. Este aspecto es muy importante puesto, que queramos o no, cada día somos más individualistas, incluso el trabajo cada vez es más especializado, entonces creo que deberíamos centrarnos en el compañerismo y evaluar la relación entre ellos como personas, su afabilidad, la cooperación mutua, la empatía, etc. Porque no nos olvidemos que no estamos formando maquinas, sino que, a personas.

Antes de finalizar, pienso que es indispensable entregar una pauta de evaluación a los alumnos antes de la evaluación como tal, puesto que así todo el proceso es más transparente y no da cabida a quejas sin fundamento.

Y por último, destacar, que la labor del docente en el área de la evaluación es actuar con criterio y profesionalismo, ser lo más objetivo posible… ¿se podrá?...bueno, hay que hacer el intento y para eso estamos acá, para aprender a ser verdaderos educadores.

martes, 6 de mayo de 2008

COMO SE APRENDE HISTORIA Y GEOGRAFÍA


Pueden haber muchas situaciones donde se encuentra la historia, inclusive una canción (Intillimani por citar un ejemplo), una libro poético (Puede ser “La Araucana”), en fin pueden ser muchas las circunstancias donde pensamos que no hay historia y sí las hay, vale decir todo esto nos lleva hacia algo histórico, y es aquí donde hay que enfatizar, ligar la realidad de los alumnos con el tema geo-histórico. Vale decir, partir de la base que TODO ES HISTORIA…

En primer término, pienso que es distinto el aprendizaje de ambas ramas. Tanto la Historia como la Geografía tienen una metodología diferente, sin embargo, se pueden ir CONJUGANDO ciertos elementos que lleven hacia un aprendizaje, que en lo posible logre ser significativo, de lo contrario, no tendría validez.

La HISTORIA, por una parte, requiere de mucha lectura, sería absurdo negar que uno de los grandes métodos para “saber” de historia es la simple lectura. Sin embargo, la historia, no sólo consiste en aprender fechas y memorizar hechos (según piensan muchos), va más allá de eso, por lo que es muy importante entender procesos y es en este sentido donde coincide con la geografía. Dicha lectura debe ir acompañada de esquemas, resúmenes, escritos, etc., y es así como logramos hacer trabajar la cognición y asimilar el conocimiento. Para esto se requiere mucho tiempo, ¿Debemos asignar el tiempo específico o dejarlos actuar a su criterio?

Por su parte, la GEOGRAFIA, como señalaba anteriormente, requiere de un estudio donde se centre en comprender procesos, dado que todo esta conectado y como hemos aprendido, todo conforma un sistema, en este caso, un geosistema. Los esquemas, en esta rama sí que importan, se debe relacionar todo y puede ser esto tanto inductivo como deductivo.

Existen varios métodos para ambos; señalaba el tema de la LECTURA… considero que es un muy buen método, principalmente con Historia, puesto que es leyendo donde tenemos la base teórica para contextualizarnos y conocer el contenido. En la geografía también es una buena técnica, sin embargo, ésta última requiere de mayor análisis para comprender el comportamiento de nuestro entorno.

En base a lo anterior, considero que también una buena técnica de aprendizaje es el ESTUDIO GRUPAL, puesto que así se comparten distintos puntos de vista, y por lo demás se logra extraer lo esencial de cada contenido, pero lo más importante es que genera discusión, tema importante en la historia y la geografía. Incluso, existen personas que entienden mucho más cuando conversan de las materias. En lo personal es una técnica que ha dado muchos frutos.

Para lograr aprender historia y geografía también es imprescindible la labor del PROFESOR, aunque en ocasiones se piense lo contrario (dada la idea del autoaprendizaje, que por lo demás es mal entendida por algunos, incluso docentes), la labor del profesor es indispensable, dado que logra pavimentar un camino para la enseñanza. Éste es el que sienta las bases del aprendizaje significativo y es también el que motiva a los jóvenes a aprender lo bella que puede resultar la Historia, lo entretenida que es también la geografía y cuan útiles son sus contenidos.

Otro aspecto importante a desatacar es el de “APRENDIZAJE EN TERRENO”. Considero que romper un tanto con los esquemas establecidos, ayuda mucho a tomar el gusto por aprender, y saliendo a terrenos fomenta dicho interés. Esta técnica es útil tanto para la Historia como la Geografía, por ejemplo en el ámbito histórico puede ser significativa la visita a un museo y en geografía conocer la costa de nuestro región. Va a depender también de los recursos disponibles, del interés, de la motivación, en fin… diversos factores.

Por último, quisiera destacar que es muy distinto el hecho de aprender Historia y Geografía estudiando “Pedagogía en Historia y Geografía” que estando en un curso de enseñanza media. Los primeros estamos en esto porque nos motiva, porque es un agrado conocer el pasado histórico, porque por vocación queremos aprender, sin embargo para los alumnos de educación media es un ramos más, una materia que incluso pueden sentir que en nada les aporta (los humanistas muchas veces son subestimados) y es ahí donde la labor del profesor se torna importante, pues además de guiar a los jóvenes en el proceso educativo, debe enseñar de forma didáctica, debe contextualizarlos, mostrarles la realidad social y demostrarles que la historia y la geografía no están alejadas de su vida. Ante esto… ¿Cómo motivarlos?

Para finalizar, quisiera reiterar una frase que ya he mencionado, porque pienso que refleja lo que todo profesor de historia debiera dar a entender a sus alumnos para que estos se relacionen más de cerca con nuestra asignatura…TODO ES HISTORIA…